Amado, me quedo pensando en el significado de tu nombre, en
tu familia, en porqué no quieren hablar de tu asesinato. Han pasado ya varios
años de tu muerte, la herida debe seguir abierta, el silencio como fruto de la
impunidad. Pensando en cómo iniciar a contar tu historia, si éste fuera un
homenaje para mi, me pregunto ¿qué me gustaría que destacara el autor?
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Amado Ramírez Dillanes, corresponsal de Televisa en Acapulco,
Guerrero. Naciste en Oaxaca. De tu pueblo, Tlacamama, saliste rumbo a Acapulco
aún siendo un niño. Estudiaste en la Ciudad de México para después regresar al
puerto que te vio crecer y ser uno de los primeros periodistas licenciados en
la localidad.
Hace más de cinco años fue seis de abril del 2007, el día en
que te asesinaron. Tenías 50 años, más de una década trabajando como
corresponsal, toda una vida dedicada al periodismo. En 1990 eras el reportero
estrella del periódico local Novedades, habías trabajado en el Fideicomiso y como
jefe de prensa del Instituto Mexicano del Seguro Social del estado, para
después elegir la corresponsalía de la televisora en el puerto turístico.
Eras de los periodistas “más activos”, concuerdan tus ex
compañeros de trabajo. Al señalar tu carácter te describen como “chambeador”, “súper
movido”, “trabajador”.
Y lo eras. El día que te mataron Amado salías del edificio
Nick, ubicado en la calle La Paz de la colonia Centro en Acapulco, después de
conducir como todos los días junto con Misael Habana el noticiero de radio “Al
Tanto”.
Era viernes santo y las calles del zócalo del puerto estaban
llenas de turistas. Los testigos del crimen describen un asesino de
aproximadamente 25 años, alto (1.80 metros), que te esperó. Subiste a tu
automóvil, lo encendiste y te disparó.
Se escucharon seis disparos y un hombre gritó: “Para que no
te vuelvas a meter con nosotros”, declaró Omar Palacios. Jesús Avilés Clemente también
escuchó los disparos cuando caminaba por las calles José Azueta y La Paz,
confirmó ver a un hombre guardándose la pistola debajo de la ropa. Lo mismo
dijeron los hermanos Rodríguez Priego, ellos vieron un joven correr que intentó
esconder el arma mas “le quemó el cañon”. Lo anterior según las declaraciones
primarias del expediente 87/2007-2
Mientras tu asesino huía caminando Amado, tú saliste del
vehículo, agonizaste por minutos y falleciste en la entrada del hotel
California. Otra versión habla de que el asesino te disparó por segunda ocasión
en la espalda y te remató a la entrada del hotel. Los agentes del ministerio
público encontraron seis casquillos percutidos calibre .38 súper.
Tu ex colega Erick Miralrío sostiene que él y su compañero
del Periódico El Sur fueron los primeros en llegar a la escena del crimen: “Cuando
llegamos estaba vivo todavía, después los paramédicos lo cubrieron con una
manta. La mayoría de la gente que estaba ahí eran turistas. Poco a poco fueron
llegando los reporteros, unos lloraron, otros se preguntaron porqué. Yo creo
que nadie lo podía creer”, recuerda.
Tu cuerpo Amado, fue cremado. Tus cenizas esparcidas en el mar
por tu esposa y tus dos hijas.
La Subprocuraduría de Investigación Especializada en
Delincuencia Organizada descartó atraer tu caso, para ellos no existían
evidencias de que el crimen organizado estuviera involucrado. Y luego, el 10 de
abril, la Policía Federal detuvo a
dos sujetos presuntos responsables de tu asesinato. Se les encontró un revólver
del mismo calibre con el que te mataron. Señalaron a Genaro Vázquez Durán como
tu asesino.
Leonel Bustos, su acompañante, lo incriminó al declarar en su contra.
¿Sabes? En la investigación se siguieron cuatro líneas: asunto pasional, narcotráfico, grupos
guerrilleros y tu actividad profesional. Las pruebas hechas a la pistola encontrada
a los presuntos responsables determinaron que no fue la misma arma utilizada en
tu asesinato. Ningún testigo de la primera declaración volvió a presentarse.
¿Sabes? Acerca de los detenidos, en enero de 2008 el Ombudsman
nacional, José Luis Soberanes, ordenó investigar la tortura e inconsistencia de
testimonios. Vázquez Durán negó conocerte, pues trabajaba en Estados Unidos desde
hacía 17 años.
¿Sabes? Acerca de la condena, en marzo del 2009 el juez José
Jacobo Gorostieta, determinó un móvil pasional y sentenció a 38 años de prisión
a Vázquez Durán por tu asesinato. Un año después el Primer Tribunal Colegiado
le concedió el amparo y ordenó la reposición del proceso. Esto no se hizo
porque no se encontraron a los testigos.
Tu compañero Aurelio Peláez intuye que tu asesinato estuvo
bien planeado: “La oficina de Amado está en pleno zócalo. De donde lo mataron a
unos 100 metros está un ministerio público con judiciales, es una zona muy
vigilada en teoría. Debió haber sido una cosa muy planificada para que un
carnicero solito lo haya hecho.”
¿Sabes? A la fecha tu asesinato se contabiliza como el
segundo de un periodistas durante el sexenio de Felipe Calderón.
Tus colegas y familiares siguen exigiendo se investigue y resuelva tu caso.
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